En las últimas semanas, el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM), ha emitido alertas sobre el incremento en la temperatura de las aguas superficiales del Océano Pacífico; en donde advierte que a finales del 2018 e inicios del 2019, existe la posibilidad de darse las condiciones propicias, tanto en el océano como en la atmosfera, para el desarrollo de un fenómeno “El Niño”.
Carlos Pinzón, climatólogo del Proyecto de Monitoreo Microclimático en Santander, señaló que “las condiciones del Océano Pacifico está dentro del rango de normalidad, pero de seguir el calentamiento del océano y llegar a tener un acoplamiento con los vientos, es posible que se dé inicio a este fenómeno, durante el segundo semestre del año, pero se debe esperar un par de meses para poder confirmar el inicio de “El Niño””.
Esta información es importante para los agricultores del Proyecto de Monitoreo del Comportamiento Climatológico en el área de influencia de la Central Hidroeléctrica Sogamoso, pues con la llegada de este fenómeno natural se pueden presentar las siguientes condiciones en los cultivos: marchitamiento de los frutos, incendios forestales, estrés ambiental, disminución de la disponibilidad hídrica en los suelos y, posiblemente, en la productividad.
Algunas de las acciones que se pueden implementar para evitar riesgos, son: el uso de materia orgánica y la implementación de coberturas vivas e inertes en el suelo, para aportar nutrientes a las plantas; el control de insectos para evitar plagas y el uso mínimo de labranza y cosecha de agua-lluvias, acompañado de la implementación de árboles de sombríos.
Con acciones de prevención, se pretende disminuir los posibles efectos negativos en los cultivos de cacao, café y tabaco, los más comunes en la zona, debido a las consecuencias que puedan llegar a ocasionar la posible aparición de un fenómeno “El Niño”.
Esta información hace parte del “Programa para atender la percepción de la comunidad acerca de posibles cambios microclimáticos ocasionados por el embalse Topocoro” y el Proyecto de Monitoreo Microclimático en el área de influencia de la Central Hidroeléctrica Sogamoso, desarrollado mediante el convenio 47-681 entre ISAGEN y Fundación Natura.