Con una siembra efectuada por el Banco de Bogotá en la reserva El Silencio, del municipio de El Retiro, Fundación Natura completó la plantación de ocho mil árboles solo en esta área protegida. Se espera sembrar 1 millón en todo el país antes de que termine el año.
BOGOTÁ, AGOSTO 24 DE 2016. La deforestación en Colombia no es un tema menor. A finales del 2015, el Sistema de Monitoreo de Bosques y Carbono, del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) y el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible indicaron, en la más reciente medición anual reportada en el país, que durante el 2014 se deforestaron 140.356 hectáreas de bosques. Esto equivale a decir que, en 12 meses, fueron arrasadas el equivalente a 200 mil 500 canchas de fútbol cubiertas de árboles.
La Amazonia y la Orinoquia han sido las regiones más afectadas. También la Andina. Y se detectó que el 61 por ciento de la deforestación se ha concentrado en cinco departamentos: Caquetá, Meta, Putumayo, Chocó y Antioquia.
La solución a este problema, según los expertos, dependerá de los esfuerzos del Gobierno, que tendrá que reforzar los controles y las sanciones, por ejemplo, a los comerciantes de madera ilegal. Pero, además, una parte del remedio se concentrará en los esfuerzos de la sociedad civil y las organizaciones ambientales independientes.
Y precisamente en Antioquia, la Fundación Natura acaba de terminar la siembra de ocho mil árboles en la reserva El Silencio, del municipio de El Retiro, un terreno de 167 hectáreas que se ha convertido en un laboratorio de restauración ecológica para terrenos afectados por la ganadería, la sustracción de maderas finas y la siembra de monocultivos como el pino.
La plantación más reciente, con la que se aportó a esta meta, se realizó el pasado 20 de agosto, cuando 80 colaboradores del Banco de Bogotá sembraron 360 árboles de las especies quimulá, drago, chagualo y camargo, una jornada que reafirmó el compromiso adquirido en la ‘Carrera Verde’ efectuada en febrero de este año y que prometió la plantación de tres árboles por cada uno de los seis mil atletas que participaron en la competencia, es decir, 18 mil en total.
“La reserva El Silencio es de gran interés para el país porque allí están los últimos bosques tipo montano, desde hace años muy degradados en Colombia, especialmente en esta zona de Antioquia”, explicó Clara Solano, subdirectora de Conservación e Investigación Fundación Natura.
Ahora falta completar las siembras en las reservas Encenillo, de Guasca (Cundinamarca), que recibirá ocho mil árboles, y Cachalú, situada en Charalá (Santander), a donde llegarán dos mil plantas. Todo esto hace parte de la iniciativa ‘Unidos por los Bosques’, también de Fundación Natura, que busca sembrar, durante el 2016, 1’000.000 de árboles.
De ese total, y desde el 2011, se han sembrado 155.000 árboles. Entre ellos han sobresalido las especies tarumo, arboloco, botón de oro, espadero, nigüito, pino romerón, aguacatillo, sauco de monte, guamo cajeto, zanca de mula, quimulá, roble y guasco.
Estas siembras se han efectuado bajo la estrategia de restauración ecológica, que consiste en conocer adecuadamente el ecosistema de referencia, establecer metas alcanzables de recuperación, crear un vivero de especies nativas para la producción de material vegetal y así poder cultivarlo día a día en el territorio.
La estrategia también incluye actividades de monitoreo que permiten llevar un control de las especies sembradas y de las especies invasoras de la zona.