En Santander, las mujeres cacaocultoras cada día se apropian del registro de información climática por medio del proceso de monitoreo participativo. La estrategia comunitaria es desarrollada por el Programa de Monitoreo Microclimático, y tiene como finalidad involucrar a los productores de la zona de influencia del embalse Topocoro en el registro de datos climáticos.
Las mujeres cacaocultoras se han destacado no solo por su tenacidad y fortaleza, sino también por su participación y apropiación en este proceso participativo. Del total de monitores con la que cuenta la estrategia, el 58% corresponden a mujeres cacaocultoras. Es de resaltar que la información recolectada les permite participar en la toma de decisiones frente al manejo de sus cultivos.
Luz Marina Martínez es una habitante del municipio de Betulia, una cacaocultora de 58 años que participa del proceso y ha vivido prácticamente toda su vida en el campo. Hasta el día de hoy no ha dejado de trabajar por su bienestar y el de su familia, conformada por su esposo, Gilberto Urrea, y sus tres hijos, a quienes les ha heredado su pujanza y amor por el campo.
Sus actividades diarias inician a las 5:00 de la mañana, cuando se dispone hacer fuego en el brasero para preparar un delicioso café y platicar con su esposo, mientras disfrutan del amanecer. La señora Luz Marina, es quien se encarga de distribuir las tareas del hogar entre sus hijos y mantener todo en orden. Además, participa activamente de las labores de la finca, como la recolección de frutos, el desengrullado y secado del cacao y, adicionalmente, es quien registra los datos del monitoreo climático diariamente.
“Yo llevo aproximadamente dos años registrando los datos del monitoreo climático. Al inicio sentía temor de dañar los equipos, pero poco a poco fui aprendiendo con ayuda de los técnicos de la Fundación Natura y ya no se me olvida registrarlos. Es muy fácil, me demoro tan sólo 2 minutos en tomar los datos del termohigrómetro y mirar la cantidad de agua lluvia que cae en el pluviómetro”, manifestó la señora Luz Marina Martínez.
Al igual que Luz Marina, otras mujeres de la región se han vinculado en este proceso de agricultura climáticamente inteligente. Cabe destacar el importante papel de la mujer campesina, que no sólo desarrolla sus actividades de hogar y sus sistemas de producción, también monitorean el clima con el propósito de tomar decisiones acertadas frente al manejo de los cultivos mejorando su productividad y su calidad de vida.
Esta información hace parte del “Programa para atender la percepción de la comunidad acerca de posibles cambios microclimáticos ocasionados por el embalse Topocoro” y el Proyecto de Monitoreo Microclimático en el área de influencia de la Central Hidroeléctrica Sogamoso, desarrollado mediante el convenio 47-681 entre ISAGEN y Fundación Natura.