Como las temperaturas en la región son altas, el riesgo de enfrentar emergencias aumenta. Es la tercera vez que bomberos lideran entrenamiento y simulacros preventivos en la zona.
SEPTIEMBRE 8 DE 2016. Colaboradores del ‘Proyecto Plan Piloto de Restauración Ecológica de Bosque Seco Tropical’, el cual ejecuta Fundación Natura en convenio con Emgesa, participaron de una jornada de capacitación y entrenamiento para fortalecer sus conocimientos y habilidades en control de incendios forestales.
Fue dirigida por los bomberos voluntarios del municipio de El Agrado, quienes orientaron al personal de Fundación Natura en la prevención, combate y control de este tipo de conflagraciones, con una jornada teórico-práctica en la que se profundizó en temas como la teoría del fuego, métodos para el combate de las llamas y conocimiento de equipos y herramientas de trabajo.
En campo se atendió, en tiempo real, un conato de incendió y se realizó un simulacro que permitió aplicar los elementos teóricos aprendidos.
En total, se entrenaron 20 trabajadores, equipo suficiente para conformar dos brigadas, que desde ahora estarán en capacidad de responder a posibles emergencias en el área de trabajo y de esa forma dar tiempo suficiente a los entes de apoyo, como bomberos, Defensa Civil o Cruz Roja, para llegar al sitio de emergencia a atender la contingencia.
Es importante destacar que esta es la tercera capacitación que recibe el personal vinculado al proyecto de restauración ecológica en prevención, combate y control de incendios forestales en el bosque seco tropical. Estas capacitaciones han estado acompañadas de tres simulacros a través de los cuales el personal fortalece sus conocimientos, habilidades y destrezas.
Este proceso de entrenamiento se hizo porque el lugar donde se ejecuta el proyecto de restauración presenta temperaturas elevadas las cuales se han agudizado con los cambios climáticos que viene atravesando el país. Para Fundación Natura es primordial tener personal preparado para atender estas posibles emergencias.
Además de lo anterior, estas acciones permiten preservar las labores, esfuerzos e implementación de estrategias de restauración realizadas en dos años de trabajo en la zona de compensación ambiental de la hidroeléctrica El Quimbo, labores que han permitido realizar importantes estudios e investigaciones del ecosistema de bosque seco, uno de los más degradados y menos estudiados de Colombia.